Una investigación de la Universidad de Barcelona y la Universidad Rovira i Virgili demostró que comer nueces aumenta los niveles de serotonina, lo que permite reducir la sensación de hambre y mejorar el estado de ánimo.
El estudio comprobó que el consumo habitual de nueces ayuda a reducir la obesidad abdominal y la hipertensión. La muestra se basó en incluir un puñado diario de nueces a la dieta de las personas que participaban en la investigación, por un periodo de 12 semanas, y ver así los cambios metabólicos.
Los análisis de orina mostraron que en aquellas personas aumentaron los niveles de serotonina a la vez que disminuyeron los niveles de sustancias asociadas con la inflamación y factores de riesgo cardiovasculares.
Según los autores, “las nueces contienen ácidos grasos insaturados y antioxidantes (polifenoles) que pueden explicar sus efectos beneficiosos y reducir con ello, la grasa abdominal acumulada”.
Excelente. A comer nueces.
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